Ella nunca olvidará
el día en que lo conoció, los días anteriores a ese habían sido
fríos y lluviosos pero ese día el sol brillaba como nunca antes, el clima era
perfecto.
Se aferró a él
sin siquiera conocerlo bien todo gracias a su estúpido y hasta absurdo miedo a las alturas, lo tomó de gancho y empezó a caminar a su lado por el puente, en ese momento por
alguna razón se sintió muy segura, decidió mirarlo a los ojos para así desviar
su mirada del que para ella era un vacío peligroso, fue entonces cuando notó que
detrás de esos lentes se ocultaban unos hermosos ojos color miel que la
hicieron olvidar por completo del miedo que sentía. Iba escuchando el sonido de
su profunda pero a la vez dulce voz, sin embargo no oía las palabras que él decía.
Su corazón
palpitaba rápidamente mientras caminaban por la calle, aunque el puente había terminado
ella seguía sin soltarlo y a el parecía no molestarle, iban hablando y riendo
y ella sintió una felicidad que hace
años nadie la había hecho sentir, y le extrañaba que un chico que había acabado
de conocer hubiese logrado encantarla en unas pocas horas, desde ese día, ella
no pudo alejarse más de su lado, él se convirtió en una parte muy importante de su
vida, para ella era esencial tenerlo cerca, porque él la hacía sentir
especial le daba seguridad y aliento para sobrevivir en un mundo que a ella le
aterraba, un mundo lleno de prejuicios y gente cruel que la habían hecho sentir
inferior durante sus 17 años de vida, un mundo en el que ella solo veía oscuridad
pero que gracias a él estaba empezando a llenarse de color
Meses después…
- Te gusto? Pregunto
el al otro lado de la pantalla
- No lo sé,
dijo ella mintiendo para no empeorar las cosas
- Si tu no lo
sabes, entonces quién? solo dime la verdad
- La verdad es
que tengo miedo, miedo de perderte, respondió ella con sus manos temblorosas
- Nunca me perderás
respondió él
*Porque no se
pierde lo que no se tiene pensó ella* mientras una lagrima empezaba a asomarse
en su ojo izquierdo
- Si, la verdad es que te quiero, pero estoy confundida.
- Ok,
respondió el de una manera tan fría que el corazón de ella se congeló
En el fondo
ella sabía que desde ese día las cosas no serían iguales, y así fue todo cambió para siempre, los colores empezaron a desaparecer de su vida de
nuevo, ella sintió que había arruinado la amistad que él le había brindado y
todo por culpa de su maldita necesidad de amor, ella solo quería que él la
abrazara mientras le susurraba al oído que todo estaría bien, un poco de amor solo eso quería, pero lo único que había logrado era quedar vacía
de nuevo.
Se acostó y se
quedó dormida llorando, pensando en él, en todas las cosas que habían sucedido
en esos pocos meses y en lo mucho que le dolía haber arruinado todo por no
haber sido capaz de ocultar el amor que sentía, el apareció en su sueño y le explico las razones por las cuales no podía aceptar su amor:
- No te merezco, encontraras alguien mejor
- Pero yo te quiero a ti, dijo ella con un hilo de voz
- Se que hay alguien por ahí que merece todo lo que tu tienes para dar y ese alguien no soy yo
- Como puedes saberlo, respondió ella sin dejar de llorar
- Solo lo sé
Ella creía que solo era una excusa para no hacerla sufrir pero aún así ella estaba sufriendo, no tenerlo a su lado la atormentaba terriblemente.
- No pido mucho solo que me abraces
El se acerco, la abrazo y beso su frente, después desapareció entre la niebla
Ella despertó de golpe entre lagrimas
- Nooo ! no quería despertar aún, gritó
Volvió a cerrar sus ojos y se durmió, pero esta vez en un sueño del que no despertaría jamas
- No debiste hacerlo pequeña, aún no era tu tiempo le dijo una extraña voz
- No quería estar sin el respondió, mientras caminaba hacia la luz para convertirse así en el ángel de la guarda que siempre cuidaría de el.